Cuando se estudian los factores que hacen que las startups fracasen, suele aparecer como el aspecto más importantes un fenómeno que resulta curioso, ya que por alguna razón existe cierta tendencia entre los emprendedores que hace que se dediquen a crear cosas que la gente no quiere comprar. Sobre esto podríamos comentar muchas razones, como lo que ocurre en ocasiones en las que el emprendedor busca cumplir un sueño personal, que realmente no encaja con el de muchas otras personas, o que no se haya realizado un correcto estudio o validación de las necesidades de la gente, o que la solución propuesta al problema existente realmente no satisface las expectativas de las personas, entre otras cosas.

Como esta situación se viene conociendo desde hace varios años, se han estado buscando soluciones al respecto y la principal propuesta que se ha realizado para evitar el problema es aplicar una metodología llamada Lean Startup que básicamente consiste en realizar un proceso que permita conocer las necesidades reales de la gente, al mismo tiempo que se va desarrollando el producto que se les quiere vender. Para ello resulta fundamental el concepto de validación, en el que desde fases muy iniciales de desarrollo del producto se tiene en cuenta la opinión de los futuros clientes.

Desde el año 2013, en el que se hizo esta propuesta de metodología, muchas empresas han seguido sus recomendaciones, lo cual ha permitido ahorrar mucho tiempo de los emprendedores y mucho dinero de los inversores, en proyectos que de otra forma habrían fracasado, por no tener una propuesta de valor adecuada para el mercado.

Tres años después de la publicación del libro Lean Startup se publicó otra propuesta que también puede resultar muy valiosa de cara a evitar el problema de la falta de interés por parte del mercado frente a las propuestas de los emprendedores. Se trata del libro Organizaciones Exponenciales en el que viene recogido un concepto denominado Propósito de Transformación Masiva, que puede hacer que cambie sustancialmente el enfoque en el que los emprendedores deciden poner en marcha sus proyectos, pasando del modelo de reinventar la rueda al de mejorar el mundo.

Lo de reinventar la rueda tiene que ver con una situación demasiado frecuente en la que se dedican muchos recursos a poner en el mercado un producto que apenas mejora las propuestas actuales, que realmente no viene a resolver ningún problema real de las personas o que no está suficientemente bien hecho como para que la gente haga el esfuerzo de cambiar al respecto de lo que ya utiliza actualmente.

Sin embargo el Propósito de Transformación Masiva consiste en encontrar un problema y no parar hasta resolverlo. Es lo contrario a tener una idea y trabajar para que la gente la acabe asumiendo. No se trata de convencer a nadie de nada, sino de entender los problemas reales que tienen las personas y hacer lo posible para resolverlos. Esta nueva forma de pensar se entiende muy bien si nos fijamos en el enfoque que promueve Singularity University al proponer a sus alumnos que trabajen en resolver problemas que afecten a mil millones de personas. Es algo así como decir a los emprendedores, si no vais a hacer algo que realmente mejore el mundo no vale la pena intentarlo, mejor seguid haciendo bien vuestro trabajo dentro de una empresa, pero si vas a emprender haz que merezca la pena.

Una vez realizada esta reflexión lo que vamos a hacer es descubrir una serie de iniciativas de emprendedores españoles a los que no les basta con hacer realidad una idea, sino que realmente se han puesto a trabajar para mejorar el mundo.

Regemat3d es una empresa de Granada que está desarrollando un sistema de tecnología de bioimpresión 3D que permite crear tejidos vivos para la regeneración de lesiones y órganos. La empresa trabaja con socios en países como Australia, Canadá y México con los que desarrolla productos como tinta biológica, regeneración de células cardíacas necróticas y regeneración de la piel del cartílago óseo

Wallbox es una empresa de Barcelona que se dedica al diseño, fabricación y distribución de puntos de recarga para vehículos eléctricos. Sus promotores son unos convencidos del transporte sostenible y trabajan para mejorar su eficiencia y practicidad en todos los sentidos, por eso apuestan por un proceso de carga más simple y atractivo para los vehículos eléctricos.

Karten es una empresa de Álava que tiene el objetivo de crear una constelación de nanosatélites y revolucionar el sector espacial ofreciendo su utilización en campos tan diversos como la observación de la Tierra, la teledetección, la exploración espacial, las comunicaciones o el área científica, donde este tipo de satélites están adquiriendo especial importancia dentro el sector medicinal y farmacéutico.

Zeleros es una empresa nacida en la Universidad Politécnica de Valencia y que se dedica al desarrollo de tecnología para medios de transporte de alta velocidad. El equipo está especializado en las tecnologías de levitación para ser utilizadas en el revolucionario método de transporte llamado Hyperloop que permitirá viajar a 1000 km/h, utilizando energías limpias, combinando las mejores prestaciones de la industria aeronáutica y ferroviaria a través de un tubo despresurizado.

Alias Robotics es una startup de Álava dedicada a la ciberseguridad para robots. Para ello han desarrollado el Robot Immune System, una solución de hardware bioinspirada que emplea técnicas inmunológicas y de inteligencia artificial para proteger a los robots frente a las amenazas del hacking. Recientemente han publicado dos papers sobre la seguridad de los robots y se proponen el objetivo de contribuir a construir un ecosistema donde los robots operen de manera segura y estén protegidos contra sus vulnerabilidades, que podrían ser explotadas por terceros.

Kowat es una empresa de Sevilla que ofrece soluciones a través del estudio, diseño, patente, fabricación y comercialización de dispositivos biomiméticos para la eliminación de plagas animales, especialmente en cultivos agrícolas y acuícolas. Estos investigan la memoria evolutiva para utilizar el miedo como método sostenible de control de plagas. Para ello crean drones que imitan todo tipo de animales con características y sonidos comprensibles para las plagas contras las que quieren luchar.

Biome Makers es una startup de Valladolid que permite evaluar el efecto de fertilizantes, estimulantes o pesticidas, y diagnosticar carencias, problemas o características especiales únicas de la funcionalidad del suelo para cualquier cultivo. Para ello ha desarrollado una tecnología que permite la comprensión del microbioma de cara a concienciar sobre el uso apropiado de los productos fitosanitarios, creando un mecanismo objetivo para medir la vida de los suelos. En paralelo, se establece un compromiso con el medio ambiente y el futuro del planeta a través de la gestión de una agricultura sostenible que permite rendimientos adecuados y garantiza la seguridad alimentaria.

Visualeo es una startup de Madrid que ha desarrollado una app que ayuda a personas y empresas a conocer el estado de un producto o una propiedad a distancia, realizando verificaciones visuales (fotografías y vídeos) en tiempo real como si se tratara de un testigo ocular o tercero de confianza. Para ello dispone de una red de verificadores, repartidos por todo el territorio nacional, que gracias al uso de la tecnología Blockchain, crean una evidencia digital inmutable que garantiza la veracidad de la información. Su misión es ser los ojos de todos, en todos los sitios y en todo momento.

Todas estas iniciativas que acabamos de conocer van conformando poco a poco un ecosistema que cada vez será más fructífero para que realmente España se convierta en un país innovador. Con el objetivo de ayudar a este fin se ha creado la iniciativa Linknovate que se dedica a identificar, explorar y poner en contacto, centros de investigación, universidades, spinoffs, startups, ideas innovadoras y nuevas tendencias del mundo de la tecnología, para la solución de los desafíos tecnológicos que se presentan en las empresas. Para ello ofrecen herramientas de software y servicios de vigilancia tecnológica, en cualquier área científico-tecnológica y en cualquier sector industrial. Por ejemplo hasta el momento han realizado trabajos sobre sensores wireless, energy harvesting y nuevos materiales para energía, automación, electrónica de consumo, forestal, alimentos, ultracongelación, aromas y salud, … para empresas como BMW, EDP, Faurecia, Arri, Siemens, Barilla, Innolat, Buhler y Repsol.

Como podéis comprobar a través de estos ejemplos Salud, Alimentación, Energía y Educación son los principales ámbitos en los que aún queda mucho por mejorar en lo que se refiere a eliminar problemas que aún tienen las personas o el medio ambiente, sin embargo estos casos que os hemos presentado podrían ser considerados como una excepción, si tenemos en cuenta todos los proyectos que se ponen en marcha cada día, muchos de los cuales apenas resultan diferenciales y por supuesto sufren el problema de descubrir demasiado tarde que el mercado no está interesado en lo que ellos proponen.

Por lo tanto nuestro objetivo debe ser promover que cada vez haya más emprendedores que realmente piensen en grande en lo que se refiere a los problemas que quieren resolver y que dediquen el tiempo necesario a entender si su idea realmente tiene un sentido en el mercado de cara a ayudar a las personas o puede sufrir el gran problema de ser ignorada en el mercado.